ALOIS HUDAL (Gratz, 1885 - Roma, 1963) El Obispo Alois Hudal nació el 31 de mayo de 1885, hijo de un zapatero de la ciudad austriaca de Graz, donde estudió teología (1904-1908) y fue ordenado sacerdote en julio de 1908. Hudal se convirtió en un destacado especialista en la liturgia, la doctrina y la espiritualidad de la expresión eslava oriental de Iglesias ortodoxas. Cumplió ministerio como capellán en una parroquia de Kindberg, antes de irse a estudiar a Roma. En 1911 se convirtió en Doctor en Teología en Graz. Después de completar sus estudios de doctorado, entró en el Colegio de Teutonic dell'Anima de Santa Maria en Roma, donde fue capellán (1911-1913), asistiendo a cursos sobre el Antiguo Testamento en el Instituto Bíblico. Allí tuvo su segundo doctorado, en Die religioesen und sittlichen Ideen des Spruchbuches (“Las ideas religiosas y morales del Libro de los Proverbios"). Esta tesis fue publicada en 1914. Tomó residencia en la facultad de Antiguo Testamento en la Universidad de Graz en 1914. Fue ayudante de capellán militar durante un período de servicio en la Primera Guerra Mundial. En 1917 publicó sus sermones a los soldados, Soldatenpredigten, en la que expresó la idea de que "la lealtad a la bandera es la lealtad a Dios", aunque también hace su advertencia contra el "chauvinismo nacional" en ese momento. En 1923 fue nombrado rector del Colegio de Santa Maria di Teutonico dell'Anima (o, simplemente, "Anima") en Roma, un seminario teológico de los sacerdotes de Alemania y Austria, donde se había presentado como estudiante del doctorado. . En 1930 fue nombrado consultor del Santo Oficio por el cardenal Rafael Merry del Val, quien en sus memorias Hudal considera un "gran señor de la Iglesia". Hudal en junio de 1933 fue ordenado Obispo Titular de Aela por el Cardenal Eugenio Pacelli (futuro Papa Pío XII), que sucedió al Merry del Val como el cardenal protector de la iglesia nacional alemana en Roma. Partió a la Morada Eterna de Nuestro Señor en Roma el 13 de mayo de 1963.
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Después de la guerra, se convirtió en uno de los principales organizadores del movimiento de exfiltración de criminales de guerra nazis a Sudamérica, las Ratlines o Líneas de escape. Esta organización facilitó la huida de Adolf Eichmann, Gustav Wagner, Alois Brunner, Erich Priebke, Eduard Roschmann, Franz Stangl, Walter Rauff, Klaus Barbie y Josef Mengele, entre otros. Del mismo modo, algunos nazis, como el austriaco Otto Wächter, estuvieron viviendo en Roma después de la guerra con total impunidad bajo la protección de Hudal. Estas actividades provocaron un gran escándalo tras su revelación en 1947 por el diario católico bávaro Passauer Neue Presse. Alois Hudal finalmente se vio obligado a dimitir como rector del Colegio Santa Maria dell'Anima en 1952. Pasó sus últimos años en Grottaferrata, y nunca mostró arrepentimiento por sus acciones, intentando hasta sus últimos días lograr una amnistía para los nazis
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