" Si es cierto que nos hace falta mucha paciencia para soportar las 
miserias de los demás, nos precisa aún mucha más para aprender a 
soportarnos a nosotros mismos. Ante tus cotidianas infidelidades, haz 
continuamente actos de humildad. Cuando el Señor te verá así 
arrepentido, extenderá su mano hacia ti y te atraerá hacia él".
 San Pío de Pietrelcina
 

No hay comentarios:
Publicar un comentario