El Obispo Richard Williamson se negó a retractarse de su visión acerca de los acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial, y mantuvo su defensa del Revisionismo Histórico, que con abundantes pruebas pone en duda la existencia de las “cámaras de gas” en los campos de detención y de que realmente hayan sido muertos “6 millones” de hebreos por parte de Alemania durante la IIa Guerra Mundial. Ahora, sus superiores de la Fraternidad Pío X lo desplazaron de la conducción del seminario de Buenos Aires por considerar “inoportunas” sus declaraciones. Seminaristas y párrocos lo defienden y dicen que Williamson es “un nuevo Galileo Galilei”
En declaraciones a Der Spiegel, el Obispo dijo: “Antes de retractarme debo revisar las pruebas históricas. Se trata de la evidencia histórica, no de emociones. Si encuentro esas pruebas (de la existencia del “holocausto” y las cámaras de gas), me corregiré, pero eso necesitará tiempo”, agregó.
Con estas palabras, Williamson respondió al pedido vaticano de “retractarse” del Revisionismo, luego de que los rabinos israelíes y la canciller alemana, que no es católica sino protestante, presionaran a Benedicto XVI. Algunos sectores “progresistas” de la Iglesia se sumaron a las críticas a Williamson y hasta pretendieron sostener que el Revisionismo Histórico es “un pecado”, aún cuando días atrás una junta de expertos en Derecho Canónico sentenció categóricamente que decir que el “holocausto” no existió no es, “bajo ningún punto de vista”, una falta religiosa.
Cuando reporteros de la agencia DPA se presentaron en el seminario bonaerense de La Reja, que Williamson presidía hasta ayer, escucharon las quejas indignadas de los fieles que defienden al Obispo. “Los judíos se van a alegrar ahora”, les espetó una joven mujer que conversaba con un cura de la Fraternidad. “Williamson es como Galileo Galilei”, sostuvo otro hombre que se acercó a los cronistas. “Hay que defender el derecho a la libertad de opinión. Galileo tenía una verdad y el Vaticano lo obligó a retractarse”, remató el feligrés.
La revista “Con Nuestro Perú” publicó este domingo un informe titulado “El Vaticano y el holocausto: Israel busca nueva inquisición”, en el que recuerda el nefasto juicio a Galileo Galilei, que en en siglo XVII se atrevió a cuestionar la “historia oficial” y a decir que el Sol no giraba alrededor de la Tierra, sino que es la Tierra la que gira alrededor del Sol, por lo que recibió una durísima condena de la Iglesia y fue obligado a pedir “perdón” por sus opiniones.
“Hoy Roma reconoce que no es un tribunal científico y que fue un error condenar a Galileo, pues la Iglesia puede opinar sobre aspectos morales de la aplicación de la ciencia, no sobre la veracidad de las teorías científicas”, afirma la revista.
“Visto el asunto desde este punto de vista, la duda de Williamson es histórica, y si se trata de establecer con precisión el número de víctimas judías, ese es un asunto que deben aclarar los historiadores, no el Vaticano, que no es un tribunal de Historia, aunque sí podría pronunciarse en aspectos morales en el manejo de la Historia; pero, como hemos visto, no se puede establecer con seguridad que el obispo comete pecado grave al dudar de algunos aspectos históricos, pues no se ha establecido con plena certeza la malicia al señalar sus dudas. Con su presión, la prensa, judíos y protestantes intentan inducir al Vaticano a establecer un tribunal histórico, que no es su razón de ser, con lo cual retrocederíamos a una etapa ya superada, como fue la del tiempo de Galileo“, concluye el semanario digital.
Por su parte, Christian Bouchacourt, superior del Distrito de América del Sur de la Fraternidad Pío X, informó por medio de un comunicado que se relevaba al Obispo Williamson como Director del Seminario de La Reja por “sus comentarios inoportunos”. De esta forma, la Fraternidad consagra la censura y castiga a uno de sus más altos dignatarios por tener una visión propia y defenderla.
La decisión de Bouchacourt no cayó bien en el seno de la Fraternidad, y hay varios seminaristas y párrocos que están comenzando a expresar su indignación. Uno de los primeros en apoyar públicamente al Obispo fue el cura Floriano Abrahamowicz, quien había explicado que “Monseñor Williamson tiene toda la razón, las cámaras de gas no existieron, son un invento. Los alemanes las usaron para desinfectar la ropa de los prisioneros y no para matar judíos”. Abrahamowicz fue supuestamente “expulsado” de la Fraternidad, aunque la orden nunca se cumplió en los hechos, y el cura sigue dando misa a sus feligreses, que declaran “su apoyo total” al religioso.
El caso del Obispo Williamson demuestra que el mundo vive en estos momentos el intento de instaurar una nueva y fatídica inquisición del pensamiento, en la que aquellos que no comparten la versión oficial de la Historia son perseguidos y condenados, al igual que lo fue Galileo Galilei hace 400 años. Sin embargo, la Verdad siempre se impone, y todo aquello que busque ser impuesto por la fuerza y la violencia, tarde o temprano caerá, porque lo bueno y lo justo siempre triunfa.
Fuente: Agencia de Noticias Red Kalki
En declaraciones a Der Spiegel, el Obispo dijo: “Antes de retractarme debo revisar las pruebas históricas. Se trata de la evidencia histórica, no de emociones. Si encuentro esas pruebas (de la existencia del “holocausto” y las cámaras de gas), me corregiré, pero eso necesitará tiempo”, agregó.
Con estas palabras, Williamson respondió al pedido vaticano de “retractarse” del Revisionismo, luego de que los rabinos israelíes y la canciller alemana, que no es católica sino protestante, presionaran a Benedicto XVI. Algunos sectores “progresistas” de la Iglesia se sumaron a las críticas a Williamson y hasta pretendieron sostener que el Revisionismo Histórico es “un pecado”, aún cuando días atrás una junta de expertos en Derecho Canónico sentenció categóricamente que decir que el “holocausto” no existió no es, “bajo ningún punto de vista”, una falta religiosa.
Cuando reporteros de la agencia DPA se presentaron en el seminario bonaerense de La Reja, que Williamson presidía hasta ayer, escucharon las quejas indignadas de los fieles que defienden al Obispo. “Los judíos se van a alegrar ahora”, les espetó una joven mujer que conversaba con un cura de la Fraternidad. “Williamson es como Galileo Galilei”, sostuvo otro hombre que se acercó a los cronistas. “Hay que defender el derecho a la libertad de opinión. Galileo tenía una verdad y el Vaticano lo obligó a retractarse”, remató el feligrés.
La revista “Con Nuestro Perú” publicó este domingo un informe titulado “El Vaticano y el holocausto: Israel busca nueva inquisición”, en el que recuerda el nefasto juicio a Galileo Galilei, que en en siglo XVII se atrevió a cuestionar la “historia oficial” y a decir que el Sol no giraba alrededor de la Tierra, sino que es la Tierra la que gira alrededor del Sol, por lo que recibió una durísima condena de la Iglesia y fue obligado a pedir “perdón” por sus opiniones.
“Hoy Roma reconoce que no es un tribunal científico y que fue un error condenar a Galileo, pues la Iglesia puede opinar sobre aspectos morales de la aplicación de la ciencia, no sobre la veracidad de las teorías científicas”, afirma la revista.
“Visto el asunto desde este punto de vista, la duda de Williamson es histórica, y si se trata de establecer con precisión el número de víctimas judías, ese es un asunto que deben aclarar los historiadores, no el Vaticano, que no es un tribunal de Historia, aunque sí podría pronunciarse en aspectos morales en el manejo de la Historia; pero, como hemos visto, no se puede establecer con seguridad que el obispo comete pecado grave al dudar de algunos aspectos históricos, pues no se ha establecido con plena certeza la malicia al señalar sus dudas. Con su presión, la prensa, judíos y protestantes intentan inducir al Vaticano a establecer un tribunal histórico, que no es su razón de ser, con lo cual retrocederíamos a una etapa ya superada, como fue la del tiempo de Galileo“, concluye el semanario digital.
Por su parte, Christian Bouchacourt, superior del Distrito de América del Sur de la Fraternidad Pío X, informó por medio de un comunicado que se relevaba al Obispo Williamson como Director del Seminario de La Reja por “sus comentarios inoportunos”. De esta forma, la Fraternidad consagra la censura y castiga a uno de sus más altos dignatarios por tener una visión propia y defenderla.
La decisión de Bouchacourt no cayó bien en el seno de la Fraternidad, y hay varios seminaristas y párrocos que están comenzando a expresar su indignación. Uno de los primeros en apoyar públicamente al Obispo fue el cura Floriano Abrahamowicz, quien había explicado que “Monseñor Williamson tiene toda la razón, las cámaras de gas no existieron, son un invento. Los alemanes las usaron para desinfectar la ropa de los prisioneros y no para matar judíos”. Abrahamowicz fue supuestamente “expulsado” de la Fraternidad, aunque la orden nunca se cumplió en los hechos, y el cura sigue dando misa a sus feligreses, que declaran “su apoyo total” al religioso.
El caso del Obispo Williamson demuestra que el mundo vive en estos momentos el intento de instaurar una nueva y fatídica inquisición del pensamiento, en la que aquellos que no comparten la versión oficial de la Historia son perseguidos y condenados, al igual que lo fue Galileo Galilei hace 400 años. Sin embargo, la Verdad siempre se impone, y todo aquello que busque ser impuesto por la fuerza y la violencia, tarde o temprano caerá, porque lo bueno y lo justo siempre triunfa.
Fuente: Agencia de Noticias Red Kalki
COMO ES POSIBLE A ESTAS ALTURAS PRESENTAR TAN ALTO GRADO DE DESCONOCIMIENTO. EN TODO CASO, SI LA HUMANIDAD QUIERE AVANZAR ESTO NO VA A SER GRACIAS AL NO RECONOCIMIENTO DE SU CRUELDAD
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